Iba a deciros que todo empezó cuando leí a Marie Kondo pero nada más lejos de la realidad. En verdad, en mi casa siempre hemos sido muy austeros. No sé si por necesidad, por condición o por ambas razones. La cuestión es que NO creemos que poseer más cantidad de cosas, nos haga necesariamente más felices y precisamente esa filosofía de vida es la que me lleva una y otra vez, al concepto de "armario capsula".
El exceso en todos los ámbitos me incomoda y no es distinto cuando abro las puertas de mi armario. No hay una sola prenda en él que no haya usado en las últimas semanas o no piense usar en las que están por venir.
Y hablando de "armario capsula" ¿habéis hecho ya el cambio de armario? Yo estoy enfrascada en ello y creo que es el momento óptimo para construir un armario práctico, coherente y con un número limitado de prendas, con vistas a los próximos meses. ¿Os animáis conmigo? Nos desharemos de algunas prendas y si es necesario, incorporaremos otras que cubran los vacíos que detectemos.
¿Qué criterio os propongo? Pues en esta ocasión yo he clasificado mis prendas según el color. Prendas exteriores, prendas superiores y prendas inferiores que combinan a la perfección porque pertenecen a la misma armonía. ¿Cuáles son los colores que predominan en nuestro armario?
a) Gama cálida o gama fría.
b) Colores claros u oscuros
c) Colores vivos o apagados.
Imagina que durante los próximos meses decides vestirte con colores fríos, claros y apagados o... que el cuerpo te pide tonos fríos pero oscuros y vivos. No no no... mejor cálidos, oscuros y apagados. En fin, tú decides.
Pues bien, esta es una forma de acotar nuestro armario o una forma de ordenarlo si no te apetece ponerle límites. Piensa en lo fácil que será elegir outfit o hacer las maletas si se nos presenta la oportunidad de salir de viaje, ¿empezamos?
1. Si te decantas por los colores fríos, piensa principalmente en el azul pero no olvides que incluso el azul tiene su versión cálida. ¿Fríos, claros y apagados? Verde jade, rosa bebé, blanco roto, gris perla, celeste, malva, ciruela...
2. ¿Fríos, oscuros y vivos? El azulón, rojo vino, berenjena, verde, amarillo fosforito, naranja flúor, fucsia... colores vitaminados.
3. Si te decantas por los colores cálidos, piensa entonces en el rojo como protagonista. ¿Cálidos, oscuros y apagados? Aquí nos encontramos con los tonos tierra: naranja, kaki, mostaza, ocre, caldero, dorados, marfil...
Camiseta rojo coral de Sfera.
d) ¿Cálidos, claros y vivos? Verde pistacho, amarillo, salmón, melocotón... cualquier color mezclado con blanco, siempre que sea cálido.
Camisa rosa pastel de Mango.
Más adelante hablaremos de patrones pero no me digáis que no es el color la primera sensación que se cuela por nuestras retinas y el que delata nuestro estilo e identidad. El color ha sido siempre mi debilidad y no puedo prometer que no vuelva a él una y otra vez. Me he iniciado en esto de la colorimetría y ya no hay vuelta atrás.
Os deseo un feliz fin de semana. Esperaba hallar la forma de coger buen color, también en mi piel pero... parece que el tiempo no va a estar de nuestra parte en ese sentido.
